Febrero de 2014
Querido Papa Francisco:
Confiamos en que te hayan resultado útiles nuestras propuestas incluidas en las cartas del 19 de setiembre y 27 de noviembre de 2013, firmadas por organizaciones católicas y también por personas a título individual de todo el mundo. Antes de que te reúnas por tercera vez con el Consejo Asesor, te enviamos ahora esta carta sobre el Sínodo Extraordinario de Obispos previsto para octubre de 2014.
Nos alegramos de tu decision de convocar este Sínodo y del compromiso con los retos pastorales urgentes sobre la familia en el contexto del Evangelio. En una homilía reciente preguntabas: “¿Cómo mantener nuestra fe en el ámbito de la familia?” Hemos luchado con esa cuestión precisamente como un aspecto crucial en nuestra propia vida y para la de tantos en nuestras propias comunidades eclesiales. Todos vemos a nuestra Iglesia en un cruce de caminos en el que tú ofreces esperanza en una renovación misericordiosa.
Nos alegramos también especialmente por tu llamada sin precedentes para obtener “aportaciones de las fuentes locales” mediante la distribución del cuestionario por parte del Arzobispo Baldisseri, reconociendo así la importancia del sensus fidelium en la autoridad para enseñar de la iglesia universal. Esta iniciativa es un comienzo para afrontar la necesidad que identificabas en la exhortación Evangelii Gaudium de promover el crecimiento de la responsabilidad de los laicos, tan a menudo excluídos “de la toma de decisiones” por un “clericalismo excesivo”. En nuestra opinion, sería bueno que el estudio que se ha iniciado pudiera ampliarse mediante la expresión del Espíritu Santo a través de las voces de los fieles que participarían en todo el proceso que está previsto.
Sin duda eres consciente de que está habiendo muy distintas concrecciones por parte de los obispos y sus conferencias episcopales al requerimiento del Sínodo de obtener respuestas de las Iglesias locales sobre las 39 preguntas del cuestionario. Mientras algunas conferencias han facilitado la participación de los fieles en este estudio que tantos retos plantea, la mayoría han hecho mínimos intentos para comprometer a las comunidades de las parroquias en este diálogo tan importante.
Nos mantenemos en nuestra convicción profunda de que además de la información que pueda obtenerse de los cuestionarios, un Sínodo eficaz sobre la Familia require la participación de mujeres y hombres católicos comprometidos de las distintas regiones de la iglesia universal en todas las etapas del Sínodo. Por ejemplo, para que sea posible investigar, intercambiar opiniones, debatir y hacer recomendaciones, sugerimos que pidas a cada diócesis del mundo que organice un sínodo diocesano en 2014 para discutir el tema y que instes a cada obispo diocesano a que anime a cada católico en su diócesis a que haga aportaciones. Las discusiones en estos sínodos deben ser abiertas y respetuosas. Las conclusiones y recomendaciones de cada sínodo diocesano serían entonces enviadas o bien directamente a la comisión preparatoria del Sínodo de Obispos, o, preferiblemente, a un Sínodo Nacional o Plenario, especialmente convocado, con una participación laical que suponga al menos la mitad de todos los miembros sinodales, con una alta proporción de mujeres para compensar la carencia de ellas en el gobierno de la Iglesia. Anticipamos que este proceso llevaría de manera natural a una representación significativa de los laicos en el Sínodo de la Familia final. Después de todo, ¿qué sería un “Sínodo de la Familia” sin incluir a aquéllos que viven en una familia?
Papa Francisco, ofrecemos respetuosamente nuestro asesoramiento y experiencia, obtenidos al vivir nuestras vidas cristianas en familias de todos los tipos de éstas. Esperamos con ilusión la confirmación de que has recibido esta carta, y a su debido tiempo, tu respuesta a nuestra propuesta de implicación de católicos y católicas comprometidos en el Sínodo Extraordinario y en sus preparativos formales. De nuevo te aseguramos que estás en nuestras plegarias y que tenemos una preocupación profunda por hacer visible la misión de Cristo de amor y justicia en las familias de todo el mundo.
Tuyos en Cristo,
Una red mundial de católicos y de organizaciones católicas
[ se adjunta la relación de firmantes y organizaciones ]
CC: Cardenal Giuseppe Bertello, Presidente de la administración del estado de la Ciudad del Vaticano
Cardenal Francisco Javier Errázuriz Ossa, Arzobispo Emérito of Santiago de Chile
Cardenal Oswald Gracias, Arzobispo de Mumbai, India
Cardenal Reinhard Marx, Arzobispo de Munich y Freising, Alemania
Cardenal Laurent Monsengwo Pasinya, Arzobispo de Kinshasa, Congo
Cardenal Sean Patrick O’Malley, Arzobispo de Boston, USA
Cardenal George Pell, Arzobispo de Sydney, Australia
Cardenal Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, Arzobispo de Tegucigalpa, Honduras